martes, 30 de octubre de 2012

"Vidas de arena y agua"

* Este cuadro quiere ser un homenaje a la gente mayor; a los heroes del día a día cotidiano; a los supervivientes del gran absurdo que, la mayoría de veces, parece gobernar los parámetros de esta gran broma que es la vida. * A modo de retrato de familia; de equipo; de gente que tiene algo en común y posan, con toda su sencillez y sinceridad, ante el espectador. * En sus caras se refleja una actitud, un trabajo, una lucha y también, el paso del tiempo. * Los tres visten una especie de uniforme o traje de trabajo en tonos grises y tierras, que bien podía ser de un superhéroe. * La mujer de la derecha representa a la reinvención, como modo de evolución. Sobre lo aprendido vuelve a empezar sin lastres negativos, dejándo atrás lo malo y aprendiendo de ello. Su cara está marcada de rojeces y arrugas; de frio y trabajo; de crudeza y realidad. En el pecho luce un autorretrato que Joan Miró se hizo con 44 años, que ya es bastante subjetivo y, sin borrarlo, volvió a dibujarlo encima con 67 años. No descartó el anterior, sinó que lo unió, los fundió, lo actualizó. Me parece todo un símbolo de evolución y la capacidad de reinventarse para mejorar, de caer y levantarse, de aprender con la experiencia. En el cinturón, luce el escarabajo alado, símbolo egipcio de la resurrección. Y de los dedos de las manos le surgen diez crisálidas de donde van saliendo mariposas continuamente. Todo esto son conceptos, ideas que enriquecen y dan fuerza al concepto base del renacimiento. * La mujer del centro, permanece siempre lista para la acción, simboliza el incomformismo y la lucha; la reivindicación y la autodefensa. Su cara está menos trabajada. Su cometido es más intelectual y luce en el pecho a la Monalisa, de Leonardo, armada de bazoca floral. Este es un stencil del artista urbano Banksy. * El hombre de la izquierda, representa la fuerza de voluntad, el ingenio, el trabajo y el empeño por conseguir unos objetivos. En su pecho luce un fragmento del cuadro de Marcel Duchamp "El gran vidrio", se trata de un ingenio mecánico que consigue desarrollar un máximo de trabajos con un empuje mínimo y acertado. En la mano porta un manojo de llaves de todos tamaños, como símbolo de las soluciones. Cada problema tiene una serie de soluciones posibles y las construye poniendo en funcionamiento todos los recurso a su alcance, evitando la confusión y la desilusión. En el cinturón, un reloj de arena. El paso del tiempo como herramienta de velocidad, de movimiento a tener en cuenta para tenerlo como aliado en lugar de enemigo. Sobre ellos, semitransparente, aparece un laberinto como representación de todo este trabajo que muestra una actitud determinada ante la vida. Para mi, la gente que pone en práctica estas cualidades; que no se aferra, inconcientemente, a repetir una y otra vez los mismos errores, me parecen superhéroes y como tales los he retratado.

sábado, 20 de octubre de 2012

"Las Hilanderas de Morphia"

* Este cuadro habla del "sueño" como herramienta de orden y resolución de conflictos. * Nos encontramos en Morphia, el reino de los sueños. En este caso, adopta la forma de un espacio inspirado en la mezquita de Córdoba, tan sugerente y cautivadora. Los sueños construyen paisajes que suelen ser la mezcla de varios, atrapados en la memoria, con unas u otras relaciones sensoriales o emotivas. * Es la estructura interior de la mezquita, con sus arcos de herradura a bandas de colores tierra, rojiza y clara. Este lugar, transmite la sensación que estar en un sitio donde la perspectiva investiga nuevas posibilidades y cada giro de cabeza o posición, dentro de ese mar de columnas, supone un descubrimiento nuevo en el concepto de profundidad y movimiento. Como nubes aborregadas, como olas del mar, como estructuras internas de órganos o microfotografías que descubren las maravillas y la perfección que es capaz de crear la naturaleza. Realmente, recuerda a las formas onduladas del propio cerebro, donde empieza a elaborarse este trabajo. Este lugar, naturalmente, tiene una puerta de entrada y otra de salida. * En el centro de la escena, se desarrolla la entregada actividad de las Hilanderas de Morphia. Ellas son el resultado paralelo, en el terreno onírico, de la actividad que desarrollaban las parcas y el destino. Su trabajo es el de deshilachar los nudos y recuperar el orden; de tejer filigranas de comprensión y la harmonía. * Allí aparecen las almas, con nudos producidos por la confusión y el miedo; la inseguridad y los falsos dogmas. Estas les devuelven el orden personal y la sana coherencia. En el sueño, todo tiene sentido; los condicionantes terrenales no tienen importancia; las reglas son básicas y claras. * Las hilanderas son tres: a) La primera porta una máscara animal de león, relacionado con la protección, la serenidad de pensamiento y la cautela. Sus ojos revelan un cariño y concentración “maternal”. Como la madre que prepara a sus hijos para la vida, sin alegría ni tristeza, con atención y cuidado. Imaginando todo lo bueno y lo malo que le depara la vida. Representa la parte pasional, emocional, orgánica. Simboliza la lucha interior y la luz solar, la mañana, la dignidad real y la victoria. b) La segunda, porta una máscara humana. Con todo lo bueno y malo que ello conlleva. Con toda la racionalidad e irracionalidad; la lucha interior bajo la máscara, con toda su ansia de probar y aprender. Representa la parte más instintiva; más imperfecta... más humana. c) La tercera está representada por un dragón alado que emerge de una espiritual lámpara de aceite. Este confiere la fecundidad, a todos los niveles, porque se vincula a las energías del agua y, por tanto, al principio yin. Es, también, representante de las energías activas. * Al fondo, acunada por la suave perfección del mar de columnas y suelo líquidamente plateado, una joven duerme ingrávida. Después del la fase de hilado, procesa lo aprendido y crece emocionalmente. Se prepara para el despertar y la nueva y fresca visión de la vida, con nuevas soluciones e ilusión. * En el extremo derecho, un alma permanece atrapada en el “árbol de las llaves”. Buscando las claves de los conflictos; de las grandes y pequeñas decisiones. Comprendiendo y asimilando o, quizá, atrapado en el laberinto de la indecisión y la duda. Sus dedos se convierten en filigranas arabescas que invitan a la concentración y el infinito.

jueves, 4 de octubre de 2012

Restauración de pinturas y esgrafiados de la bóveda de Beniatjar

En la bóveda central y el crucero de Beniatjar (Valencia) hemos destapado unas decoraciones tardobarrocas que nadie conocía. Estas, se encontraban bajo varias capas de pintura que hemos tenido que quitar mecánicamente. Lo curioso, es que en la zona de la cabecera de la iglesia se han encontrado, bajo estas decoraciones pintadas, unos esgrafiados pertenecientes a la decoración original de la iglesia 1653. Estos esgrafiados son contemporáneos a los del baptisterio, que ya restauramos, en tonos almagra y blanco.